El rape del cantábrico se captura con el arte del palangre en San Vicente de la Barquera, Santoña y Avilés. De entre los de su especie, es el más valorado.
Se trata de un pescado magro de fácil digestión que destaca por su bajo aporte calórico. Además es una buena fuente de fósforo, así que ayuda al buen estado de huesos, dientes y del sistema nervioso.